REGINO BOROBIO OJEDA. 1925. PASEO DE SAGASTA, 47
Ejercicio de estilo medievalista
El edificio de viviendas construido por Regino Borobio para Ángel Faci viene a representar la culminación del periodo de influencia medievalista que el arquitecto desarrolla en la primera mitad de los años 20. Su proyecto para el concurso de restauración del castillo de Olite, que le ocupa entre 1923 y 1925, le lleva a un estudio riguroso de la arquitectura medieval que traspone a alguno de sus trabajos del momento.
Esta influencia ya se apunta en la casa Gil Iguacel del Paseo de Pamplona, con sus miradores de desarrollo vertical y la galería de arcos del remate. Pero donde alcanza su máxima expresión es en esta Casa Faci, donde el despliegue de recursos de influencia goticista es espectacular.
Pintoresquismo y escenografía
La fachada, concebida como pura piel de un interior de estructura y distribución muy clara y ordenada, es un pintoresco ejercicio de arcos y motivos ornamentales medievalistas que culminan en el torreón que remata el cuerpo de acceso al edificio. Este eje vertical marca, a su vez, la transición entre la fachada al paseo de Sagasta y el airoso chaflán curvo que enlaza con el Camino de las Torres.
Precisamente uno de los mayores aciertos de este proyecto es la habilidad con la que Regino Borobio aprovecha los valores casi escenográficos del solar en el que se levantó el edificio. Junto a él hay que destacar el cuidado diseño, la atención a los detalles y el equilibrio con el que se mueve entre las referencias históricas y la funcionalidad constructiva. El diseño formal, de un pintoresquismo muy pocas veces conseguido en la arquitectura zaragozana, sabe contenerse sin llegar a caer en el exceso, aunque en algún momento se aproxime peligrosamente al mismo.